Allí apareció la primera civilización cuya historia conocemos gracias a la escritura y surgieron las primeras ciudades importantes del mundo.
La región mesopotámica era una zona árida, pero la construcción de canales para el regadío permitió un intenso desarrollo de la agricultura. Además, su situación geográfica la convirtió en una región clave para el comercio entre Asia Menor, el mar Mediterráneo y Siria.
Mesopotamia se dividía en dos regiones:
- Alta Mesopotamia o Asiria, situada al norte y habitada por los asirios.
- Baja Mesopotamia o Caldea, situada al sur y habitada por los sumerios y los acadios.
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